¿Se puede levantar peso durante el embarazo?
Resumen

Durante el embarazo, el esfuerzo físico resulta cada vez más difícil y levantar un peso excesivo puede ser peligroso incluso para el bebé. Sin embargo, no siempre es posible que las futuras mamás eviten levantar peso. Por ejemplo, si se trabaja en el ámbito sanitario, se desarrolla una función que requiere esfuerzo físico o, simplemente, ya se tienen otros hijos.
Summary
¿Cuáles son los riesgos de levantar peso durante el embarazo?
Efectuar frecuentemente esfuerzos físicos considerables como levantar peso o empujar y tirar con fuerza puede acarrear diversos problemas al futuro bebé, así como la remota posibilidad de que el bebé nazca prematuro o no se desarrolle adecuadamente. Además, levantar pesas durante el embarazo puede dar lugar a la aparición de trastornos, sobre todo cerca de la fecha de término, como dolores de espalda o articulares: esto se debe a la expansión del útero. En el embarazo, los abdominales están tensos, proporcionan menos apoyo y, como resultado, los músculos de la espalda deben soportar más peso y pueden llegar a sobrecargarse, lo que no permite que la madre efectúe demasiados esfuerzos adicionales. La barriga también puede hacerle perder el equilibrio, ya que el cuerpo tiende a inclinarse ligeramente hacia delante. Esta alteración de la postura carga una mayor presión sobre la espalda. Si además se levanta peso, se corre el riesgo de excederse.
Esfuerzos físicos durante el embarazo: ¿qué medidas tomar?
¿Qué hacer si no es posible evitar los esfuerzos físicos durante el embarazo? ¿A qué hay que prestar atención? ¿Cuántos kg puedes levantar en el embarazo? Estos son varios consejos útiles.
- Para el trabajo, es recomendable consultar las protecciones laborales previstas por la ley para la profesión ejercida.
Es importante escuchar siempre atentamente al cuerpo y no levantar peso excesivo ni esforzarse demasiado. Hay que prestar especial atención si la futura mamá trabaja:
– en la construcción;
– en una guardería;
– en la sanidad;
– en la hostelería;
– en una fábrica;
– en un almacén o tienda;
– en una empresa de transporte;
– en una empresa de limpieza. - Tratar de empujar, arrastrar o levantar peso lo menos posible durante el embarazo.
Algunas madres hacen demasiados esfuerzos en casa, quizás porque ya tienen niños pequeños: levantan bolsas pesadas o suben y bajan escaleras con el cochecito. Durante el embarazo, sería mejor tomarse un descanso de dichos esfuerzos, por lo que es importante tratar de obtener la mayor ayuda posible y dejar el trabajo pesado a otros. - Reducir progresivamente el peso que se levanta a medida que avanza el embarazo.
Si es necesario levantar peso, es mejor que la futura mamá no lo coja todo de una vez y que no levante más de 10 kg. Después de la semana 20, es mejor no levantar más de 5 kg, 10 veces al día. Después de la 30.ª semana, no más de 5 kg, 5 veces al día. Obviamente se trata de algo orientativo, pero es mejor respetarlo tanto como sea posible. - Prestar mucha atención a la postura cuando se levanta peso.
Es importante doblar siempre las rodillas y levantar el peso haciendo fuerza con las piernas, no con la espalda ni las caderas, procurando mantener una posición erguida siempre que sea posible, y evitando los movimientos laterales con peso en las manos. - No levantar a los niños apoyándolos sobre un lateral.
Si ya se tienen otros hijos, es mejor dejarlos a su aire tanto como sea posible. Si se levanta a un niño durante el embarazo, es mejor distribuir el peso simétricamente y no colocarlo solo en un lateral, lo más cerca posible del cuerpo. - Descansar lo suficiente.
En los ratos libres, es mejor descansar tumbándose en el sofá o hacer una siesta. Los posibles dolores después de un esfuerzo son un signo del embarazo que insta a tener más cuidado. Hacer actividad física ligera de forma regular también puede ser útil: el ciclismo y la natación son perfectos para mantenerse lo suficientemente activa durante el embarazo.