Debilidad en el embarazo: 7 consejos para combatirla
Resumen

Si estás esperando un bebé, es muy probable que te sientas sin energía, incluso más rápido de lo habitual. ¿Por qué ocurre? ¿Es un motivo de preocupación? La fatiga es un síntoma común de los primeros y últimos meses del embarazo, pero parece ser especialmente pronunciada en el primer trimestre. Esta debilidad no es nada preocupante: los cambios que experimenta el cuerpo de la madre son necesarios para el desarrollo óptimo del bebé. La intensidad o frecuencia de estas sensaciones varía de una mujer a otra: ¡aquí tienes algunos consejos para afrontar la falta de energía en el embarazo!
Summary
Debilidad en el embarazo: 7 consejos para combatir el cansancio
El cansancio del principio del embarazo parece ser el peor para las nuevas madres. Afortunadamente, suele desaparecer unos tres meses después de la concepción. De hecho, en el segundo trimestre, el cuerpo de la madre se ha adaptado a la nueva situación y recupera la energía. Veamos cuál es la mejor manera de afrontar este agotamiento:
- Adapta tu estilo de vida a tu embarazo: cuando te sientas cansada, y el contexto te lo permita, tómate un descanso, escucha a tu cuerpo y adáptate a sus necesidades
- Cuando descanses, intenta hacer pausas cortas y bien distribuidas a lo largo del día
- Acuéstate temprano
- Crea un ritual nocturno que te relaje
- Si tienes el estómago pesado, coloca almohadas debajo de tu espalda; como alternativa, puedes comprar un cojín de lactancia para ponértelo entre las piernas como apoyo para la espalda
- Cuida tu alimentación: la dieta juega un papel importante para combatir el cansancio en las primeras semanas de embarazo. Presta especial atención a los alimentos con mucho azúcar: pueden causar cansancio
- Toma alimentos energéticos, ¡te ayudarán a recuperar la energía!
Cómo cambia el sueño durante el embarazo
En esta fase de la vida de la mujer, las hormonas y los cambios físicos provocan alteraciones en los ritmos de sueño y vigilia de la madre. El cansancio y la somnolencia al principio del embarazo son trastornos causados principalmente por los cambios hormonales, mientras que al final del embarazo, la falta de energía se justifica por el mayor gasto energético que se requiere para realizar las actividades más simples. Además, en los últimos tres meses del embarazo, el bebé presiona la vejiga de la madre y esto hace que tenga que orinar con más frecuencia. Con la barriga crecida, cambiar de posición no es fácil. Tener problemas para dormir al final del embarazo es bastante común en muchas mujeres, y puede afectar aún más a la falta de energía durante el día.
Dificultad para dormir durante el embarazo: consejos para un mejor descanso nocturno
La mejor posición para dormir durante el embarazo es sobre el lado izquierdo, con una pierna doblada sobre la otra. Al dormir en esta posición, la madre optimiza el flujo de sangre al corazón, los riñones y el útero, y al mismo tiempo mejora el suministro de oxígeno y nutrientes que llegan al feto. Si lo prefiere, también se puede colocar una almohada debajo de la rodilla e incluso del estómago.
Un buen baño o ducha caliente también ayuda a inducir el sueño; o ¿por qué no probar una taza de leche tibia antes de acostarse? Estas simples acciones te ayudarán a relajarte y conseguir un sueño profundo más rápidamente.
Por otro lado, limita el tiempo frente a la pantalla; la luz brillante de la tablet o teléfono no estimula la producción de la hormona del sueño.
¿Te cuesta relajarte durante el embarazo? ¡Prueba hacerte un masaje!
El cansancio durante el embarazo también puede ser mental… ¿Te cuesta relajarte? Seguramente el masaje durante el embarazo te ayude a relajarte.
Durante el curso de preparación al parto aprendes a prestar atención a tu respiración y así mantener la calma de cara al nacimiento de tu bebé. Puede ser bastante difícil, pero intenta conservar tu energía para llegar al día del parto lo más descansada posible. Si no puedes dormir por la noche, intenta hacer una siesta durante el día. Escucha a tu cuerpo y descansa mucho. ¿Sigues sufriendo un gran cansancio? Coméntalo a tu ginecólogo en tu próxima visita.